Puerto Vallarta

Puerto Vallarta

Puerto Vallarta es un balneario en la costa del Pacífico de México, en el estado de Jalisco. Es famoso por sus playas, los deportes acuáticos y la vida nocturna. En el centro con adoquines, se encuentra la adornada iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, además de tiendas de moda y una variedad de restaurantes y bares. El Malecón es un paseo costero con esculturas contemporáneas, bares, salones y clubes nocturnos.

Los Arcos de Puerto Vallarta

Los arcos de Puerto Vallarta son islas rocosas que sobresalen del mar, y han sido consideradas como parque nacional marino desde hace 34 años. Anteriormente, los arcos eran conocidos como “Las Peñas”, el cual era una referencia a las decenas de espacios entre tierra y mar de la bahía: los peñascos. Encontrarás arrecifes, túneles y cuevas; lo cual lo convierte un un sitio ideal para que especies marinas y algunas aves (como los pelícanos, los pájaros bobo, las garzas, las fragatas y los pericos verdes) se reproduzcan y se alimenten. Gracias a su particular forma y concentración de fauna, son una atracción para practicar deportes acuáticos, como snorkel y paddle board, o simplemente para admirar.

Playa Las Ánimas

Playa Las Ánimas de Quimixto, más conocido, simplemente, como «Playa Las Ánimas», es una hermosa playa y pueblito en la zona sur de Puerto Vallarta más allá de Boca de Tomatlán, a la cual sólo se puede llegar por mar.
Es la primera parada importante de los taxis acuáticos (llamados localmente «pangas») cuando van hacia la zona occidental de la sección sur de la Bahía de Banderas, aunque hay una parada un poco antes que se ha vuelto popular en Playa Colomitos.

El Malecón de Puerto Vallarta

El Malecón de Puerto Vallarta, es una de las principales atracciones de la ciudad, kilómetro y medio de esculturas, palmeras, colores, mar y el espíritu de Vallarta y de México. Sin duda, un viaje a la ciudad sin visitarlo sería un desperdicio.
Se dice que si visitas la ciudad y no vas al malecón no has estado en Puerto Vallarta. Pasear por él es conocer el corazón y el alma misma de de este pueblo ahora transformado en ciudad, es el alpha-omega de lo que es el espíritu Vallartense y, sin duda, después de visitarlo sabrán de qué hablamos. Pasará a formar parte de tu memoria de la ciudad para toda la vida, los colores, el ambiente, los aromas, la gente, las tradiciones, el arte, la armonía del lugar y su entorno y la belleza finalmente harán que forme parte de tus recuerdos preciados.